viernes, 17 de marzo de 2023

Los placeres celestiales.

 

«Naturalmente, con el paso del tiempo nos iremos haciendo cada vez más audaces. Todo aquello que siempre quisimos saber sobre el sexo y no nos atrevimos a hacer… ¡ahora toca! Tras el placer disfrutado en pareja, en las más caprichosas posturas y con el más exótico refinamiento (no se debe olvidar que también hay chinos y árabes entre los muertos), vendrá el sexo a tres, a cuatro, etcétera. Seguidamente se comenzarán a explotar las posibilidades especificas supraterrenales: el sexo en vuelo, el sexo sobre una nube, el sexo dentro de la nube, sexo en estado de ingravidez, sexo en el centro del huracán, sexo con el ángel caído o con el que está a punto de caer…

¡Y todas esas orgías con las que uno ni siquiera se atrevió a soñar mientras estaba en la Tierra! La primera, quizá, para celebrar nuestro primer aniversario en la Vida Eterna, la próxima con motivo de la bendición de nuestra nueva villa junto a la playa, después para celebrar la llegada de algún antiguo amigo de la juventud…También nos atreveremos con los ángeles del mismo sexo, aunque solo sea para comprobar que en la Tierra no nos perdimos gran cosa. Todo es posible y, por tanto, no quedará nada que un ángel curioso no haya probado al menos una vez. En este reino de la libertad no pueden, en forma alguna, existir los tabúes.

Lo más selecto será en encuentro con los sex simbols terrenales: Brigitte Bardot, Cher, Madonna, Warren Beatty, Silvester Stallone, Arnold Schwarzenegger… cualquiera de ellos puede aparecer un día por la puerta. Después de la alabanza de los oportunos meritos de los viajeros recién llegados – pronunciadas tal vez por el inmortal marques de Sade o el supraterrenal Henry Miller- tendrá lugar una orgía masiva y generalizada que puede durar hasta una semana.»

 

La educación de los ángeles. La vida eterna: ¿una aspiración razonable?

Autora: Esther Vilar.

 

No se exactamente qué tipo de idea orgiástica tiene Esther Vilar de la vida después de la vida. ¿Un todo sexo continuo? Personalmente me rompería los esquemas. Supongo que habrá sexo también allí. Aunque se me hace difícil asimilar que seres espirituales necesiten algo tan terrenal como el sexo.

Bueno, cuando estemos allí lo sabremos.

Digo que me rompe los esquemas porque una eternidad de sexo o una eternidad sin hacer nada, tampoco se adapta a la idea concebida que tengo del Cielo. A mi personalmente me interesa más conocer a grandes personajes de la historia, conocer otros mundos y los misterios que nos rodean. Viajar a otras galaxias y conocer otras razas humanas fuera de la de nuestro planeta… En fin, que si tengo una eternidad que sea para conocer cosas que expandan mi mente.

Pero lo que me más gustaría, aunque puede ser un concepto más romántico es el poder ayudar a los demás. ¿Recuerdan la serie de televisión Autopista hacia el Cielo protagonizada por Michael Landon? Aquel ángel que vino a la Tierra a ayudar a enderezar el rumbo en la vida de las personas que más lo necesitaba. Pues eso, si llego al Cielo que lo dudo, es lo que me gustaría hacer cuando viva para la eternidad. Poder ayudar a que otros también alcancen la Eternidad. Entre eso, conocer a grandes personajes de la historia, pedazo de debates tendremos, y conocer los secretos de la vida yo me conformo. En fin cada uno tiene su propia concepción del cielo. Pero la única que valdrá es la que nos encontremos.

Feliz fin de semana hiperbore@s.

miércoles, 15 de marzo de 2023

El peor vecino del mundo.

 


Título original: A Man Called Otto

Año: 2022.

Duración: 126 min.

País: Estados Unidos

Dirección: Marc Foster.

Guion: David Magee. Guión original: Hannes Holm. Novela: Fredrik Backman

Música: Thomas Newman

Fotografía: Matthias Koenigswieser

Reparto: Tom Hanks, Mariana Treviño, Manuel García-Rulfo, Rachel Keller, Cameron Britton, Mike Birbiglia, Kelly Lamor Wilson, Josefine Lindegaard, Elle Chapman, Juanita Jennings.

Compañías: Coproducción Estados Unidos-Suecia; Playtone, STX Entertainment, 2DUX², SF Studios, SF Productions, Sony Pictures Entertainment (SPE). Distribuidora: Sony Pictures Entertainment (SPE)

Género: Drama, comedia.

 

Hace tiempo que quería ver El peor vecino del mundo y recientemente la he visionado. Esperaba encontrarme una comedia al más puro estilo Hanks y lo qué me he encontrado es un magnífico drama que ha humedecido mis ojos. De esas películas que empiezas a verla y dices me han engañado y luego quedas maravillado.

Empiezo reseñando que esta película es un remake de una producción sueca del año 2015 bajo el título Un hombre llamado Ove. A su vez basada en el libro “Un hombre llamado Ove” escrita por Frederick Backman. No la he visionado, ni leído la novela, así que la dejo durmiendo el sueño de los justos.

Otto Anderson (Tom Hanks) es un viudo cascarrabias y muy obstinado. Un hombre que muy metódico que le gusta el orden, la disciplina y la seriedad. Los horarios y las normas están para algo.

Pero su vida está vacía, carente de sentido… Hasta que llega la alegre Marisol (Mariana Treviño) con su familia. Ella y Otto son de un carácter totalmente antagónico. Eso supone un punto de inflexión en su vida, pues Marisol es literalmente en varios momentos de la película un verdadero ángel de la guarda.

Todo ello lleva a Otto a tomar un rumbo hasta ahora no pensado, pues su único anhelo es volver a reencontrarse con Sonya, su esposa fallecida tiempo atrás y que era el motor de su vida.

Pero la película no es sólo eso. Es también una durísima critica hacia la vejez, enfermedad, la enemistad, soledad, los abusos de poder y el Sistema que dirige este mundo y que quieren imponernos con calzador.

También hace una crítica/alabanza a las tecnologías, redes sociales y de esa anestesia general que tiene gran parte de la sociedad, sobre todo la juventud, con el smartphone donde se prefiere antes grabar un suceso que ayudar a quién necesita auxilio.

Otto pertenece a esa sociedad de ley y respeto que hoy se quiere aniquilar. Pero es a la vez una película que va al albur de los tiempos sin prejuicios ni desprecio hacia todo lo bueno que traen el cambio constante de épocas.

Y hablando de épocas la película es atemporal entre el pasado y presente de Otto. Sólo así puede comprenderse y dar explicación a las sombras que envuelven al protagonista.

Es una película muy bien rodada e interpretada por cada actor dentro de su rol. Tiene un alma, humanidad y asertividad que son bastante conmovedores (en varias escenas mis ojos se humedecieron).

Se que las comparaciones son odiosas, pero esta película me ha hecho recordar a otra obra maestra como es Gran Torino de Clint Eastwood con la diferencia de que esta es de un corte más comediante y dulcificado.

Mi valoración 5/5.

Saludos y buenos libros... ¡Y películas!

viernes, 10 de marzo de 2023

Tú de Marte y yo de sábados.

 

Género: Novela.

Autora: Dona Ter (España).

Año de publicación: 2021.

«Subo las escaleras del centro comercial con la mirada bailando de aquí para allá, como lo haría alguien de seguridad, vigilando cada rincón. No busco nada en concreto, o puede que sí, una señal que me diga: «Anda, date la vuelta, que aún estás a tiempo». Un mensaje que como la mona, por mucho que cambie de vestido… Aquí, «la mona» es la misma que se lleva repitiendo en mi mente desde hace días: es una locura. Sigo ignorándola como he hecho mientras me vestía o esperando el bus que me ha traído hasta aquí. Pero en lugar de encontrar mensajes de alarma, todo lo que me rodea son señales, o eso quiero creer. La última ha sido que me cayera un copo de nieve justo al bajar del bus y lo han seguido unos cuantos en el corto trayecto que hay desde la parada hasta la entrada de Harrods…»

 

Hoy traigo una novela leída a destiempo, no me dieron los días pre navideños y Navidad para ello, pero mi galena insistió en que la leyera. Así que modifiqué el planing y me lancé a ello.

He de admitir que el libro me ha encantado. Sublimemente escrito nos evoca a aquellas películas romántico-navideñas de la década de los 90 y principios de este siglo.

Dos personajes principales la conforman: Candy y Lionhert.

Ella una joven trabajadora de una empresa de representación de artistas. Él una estrella de rock, está en horas bajas.

Lionheart está entre las cuerdas, pero le han dado una solución a sus problemas. Candy tiene una misión: obligar a Lionheart a escribir un villancico para la estrella del momento, Nala.

Cuatro notas y un estribillo pegadizo que haga que los de la discográfica no lo denuncien. Si Lionheart no cumple con este ultimátum, será el fin de su carrera y la de su representante (incluidos los trabajadores, entre ellos, Candy).

Diecisiete días para escribir una canción. Diecisiete días juntos. Diecisiete días de Navidad en noviembre.

Candy, que lleva a sus espaldas toda una historia vital pese a su juventud, es una idealista de una época como la Navidad. Era Noviembre y ella en su mesa de trabajo ya tenía puesta decoración navideña. Lionheart en cambio es un pragmático, aunque igualmente tiene tras de si toda una historia que desemboca en su estado actual de depresión y aislamiento.

En este libro su nudo, trama y desenlace están muy bien estructurados. Como lector igualmente lo divido en tres partes. El conocimiento. El amor desenfrenado, en ese punto la novela tiene un toque erótico, pues aúna de la mano amor y sexo. Y su tercera parte que es el perdón.

Por otra parte que nadie se lleve a equivocación. No es una novela de un corte claustrofóbico en medio de la tensión emocional y sexual entre sus protagonistas. Al contrario, es una historia muy dinámica que evade al lector a visualizar muchísimos escenarios teniendo su epicentro en un ambiente idílico.

Mi valoración, contra mi propio pronóstico, es de 5/5. Dona Ter ha escrito un magnífico y emocionante libro donde el amor se manifiesta en su máxima expresión.  La misma autora al final de libro decía lo siguiente:

“Estás contenta por haber terminado, pero una parte de ti ya se está empezando a despedir de los personajes que te han acompañado durante meses.

No me veis, pero estoy sonriendo y llorando al mismo tiempo. Los escritores solemos ser así de bipolares…”

A mí me ocurrió igual al finalizar el libro. En esos días que acompañé a Candy y Lionheart despertaron mis máximas simpatías. Ojalá todo el mundo pudiera experimentar ese amor en las fechas más bonitas del año. Porque este libro es un canto al amor.

Saludos y buenos libros.