Género: Novela.
Autor: Paul Fleischman (Estados Unidos).
Año de publicación: 1998.
«Brent consultó su reloj. Eran las cinco y treinta y cinco. Odiaba las horas antes de una fiesta. Una energía nerviosa se agitaba en su interior. Volvió a concentrarse en la pantalla del ordenador y, empujado por la musiquilla incesante, recorrió a toda velocidad los oscuros pasillos del videojuego disparando contra todo lo que se le acercara…»
Hoy traigo una interesantísima novela de las catalogadas como juveniles. Aunque eso de catalogar libros es un concepto que no me gusta pues creo que pasada una edad se puede leer cualquier libro. Acotar un libro por ejemplo a “juvenil” parece como si ya luego de adulto no se pudiera leer sin que parezca una puerilidad. Pero bueno, eso ya es tema para psicólogos y educadores y no para este humilde blog.
Paul Flieshman nos presenta en este libro la historia de Brent. Un joven que por unas circunstancias específicas, por supuesto no las voy a desvelar, cambia en un instante su vida. Esto hace una especie de efecto dominó de que en el trascurso del tiempo cambie la vida de otras personas que no conocen a Brent, ni siquiera entre ellas mismas, en cuatros puntos de Estados Unidos. ¿Serendipias? No creo que sea la palabra adecuada. Tal vez la palabra causalidad le sea más acorde.
Es una novela con un mensaje muy potente de como nuestros actos, consientes o inconscientemente, pueden cambiar la vida de personas que ni siquiera conocemos y de las que estemos a miles de kilómetros de ellas. Algo que por otra parte vemos a diario, aunque no nos demos cuenta, en todos los estamentos de la sociedad. ¿Alguna vez nos hemos parado a pensar la enorme dependencia que tenemos en muchos aspectos de nuestra vida en persona que ni siquiera conocemos? Claro ejemplo estos tiempos que padecemos. Aunque la novela se centra en cuatro historias en concreto, originadas por una primigenia, la de Brent, no es sino un alegato a las consecuencias de nuestras acciones. Tal vez por eso sea un libro catalogado como juvenil pues es en esa edad donde las personas ya empiezan a tomar sus propias decisiones.
Libro totalmente para leer a cualquier edad pues nuestra vida siempre es una suma concatenada de decisiones + acciones. No es una novela precisamente nihilista. Al contrario, es un libro que se contrapone al mismo, ya que nos da la lección de que todo tiene consecuencias. Da igual que sean positivas o negativas. Al final todo es consecuencia. Este es un libro de reflexionar. Escrito en un lenguaje sencillo, como sus personajes, y unas historias amenas que marcan sus vidas, pero que nos trasmite un mensaje fuertemente humanístico. De esos libros que dan para pensar en una profunda meditación poslectura.
Saludos y buenos libros.