Género: Novela.
Autores: Og Mandino y Buddy Kaye (Estados Unidos).
Año de publicación: 1978.
«Los iracundos vientos del invierno llegaron prematuramente a las desoladas extensiones del reno, al norte del Círculo Polar Ártico. Por encima de sus estridentes ráfagas pudo escucharse el eco del aullido quejumbroso de un lobo solitario en medio de las densas nieblas… y aquel temible ruido, heraldo del peligro, penetró las paredes de todos los hogares y cabañas en la remota ciudad lapona de Kalvala. Tulo Mattis dejó caer su lápiz e hizo a un lado el gran libro con cubierta de piel verde. Contuvo la respiración y escuchó. El lobo aulló de nuevo, hasta que se oyó un solo estallido, era el disparo de un rifle, a través de la tundra helada. Con un suspiro de alivio, Tulo se levantó…»
Este es uno de esos libros que llegan hasta nosotros por las causalidades de la vida y que nos muestran una maravillosa historia como la que hoy traigo al blog. Pero antes quisiera comentar, eso es otra causalidad y de cómo me crucé con este libro.
Mi galena se encontró en las minibibliotecas, un día escribiré sobre estos pequeños habitáculos llenos de cultura, con una serie de libros. Ella como me “quiere” y “aprecia” de manera descomunal me envía siempre fotos para hacerme rabiar con las joyas que va consiguiendo. Y en una de las imágenes vi la portada, la primigenia de 1978, de “El don de la estrella”. No sé qué me llamó la atención de ella, pero me dije he de leer este libro, pues creo que en sus páginas se condensa una gran historia. Así que lo busqué. La verdad que no tardé mucho en leerlo y quedé fascinado de este relato. Esto es a grandes rasgos de cómo me enteré de la existencia de este libro. Ahora quisiera pasar a escribir mis impresiones sobre el mismo.
Para unos es un libro de autoayuda. Para mí es una historia de un fuerte concepto humanístico, e incluso espiritual. En ella Dios está muy presente bajo la advocación de la Fe. No quiero con ello decir que sea el típico libro donde todo es cuadriculado y esto es así porque lo mandan los cánones. No. Es un libro de fuerte presencia de la Fe en una base más espiritual que dogmática. El relato de la historia de Tulo Mattis y su familia formada por Pedar e Inga (sus progenitores), su hermana Janna y su tío Varno. Incido en esto porque es muy importante el rol que juegan cada uno en el libro. Aunque si tuviera que quedarme con dos personajes fuera del protagonista que es Tulo indudablemente optaría por Janna por su tremenda inteligencia, bondad y madurez, pese a su corta edad, y por Varno, hombre recio, callado, realista y posiblemente viendo como su mundo y el de sus ancestros se derrumba ante los nuevos tiempos. Ya de por sí el personaje de Varno es una muestra de la paulatina desaparición de esas poblaciones nativas que habitan en las latitudes más al norte del agreste Septentrión. En este caso el pueblo Sami en Noruega, aunque esta etnia está igualmente presente en Suecia, Finlandia, Rusia, Ucrania y Estados Unidos. Es una llamada de socorro la que también hace este libro en pro de esos pueblos que cada vez ven más reducido sus territorios, creencias y tradiciones frente al empuje de la modernidad. Igualmente he consultado y no existe ninguna zona llamada Kalvala en Noruega. Tal vez los autores enmascararon el nombre de “Kalevala”, que es una epopeya finlandesa compilada por Elias Lönhort y publicada en 1835 (ampliado en 1849) a partir de fuentes folclóricas finlandesas, transmitidas oralmente de generación en generación. Pero esto último ya son especulaciones por mi parte.
Luego personajes como Pedar e Inga forman parte de la historia de principio a fin, pero no les voy a desvelar cómo para no desentrañar en profundidad el libro que tampoco es muy extenso. Todo ello acompañado de varios personajes que son la realidad de la humanidad junto a otros dos protagonistas totalmente elevados en la trascendencia de lo suprahumano como son Akbar y Lirra que tampoco quiero comentar mucho más allá de sus nombres.
Todos estos personajes pergeñan una historia en medio de muchísimas adversidades como son el sacrificio por los hijos, los golpes de la vida, la muerte, las tragedias que no podemos evitar que hace que nuestro protagonista tenga que reivindicarse a sí mismo en lo que es, en lo qué debe ser y en lo qué nunca deberá ser. Og Mandino y Buddy Kaye nos muestran como en un espejo quiénes han venido a este mundo a lucrarse y quiénes para hacerlo un poco mejor y más humano. Fueron ellos mismos quienes dijeron:
"Hay quien lucha con denuedo por engrandecerse, adquirir poder y riqueza. Y hay quien se propone dejar a su paso un mundo mejor del que se encontró al llegar. Para unos, la nieve es una tumba fría en la que se sepultan las más bellas ilusiones, donde se congelan los más caros sueños. Para otros es una pista tersa por la que pueden deslizarse sin tropiezos, mientras gozan de su sedante blancura. El don de la estrella palpita en nuestro interior. Todos podemos ver brillar la luz en medio de la tormenta".
Para mí ha sido una historia de unos valores que por desgracia perdimos hace mucho y que necesitamos recuperar con urgencia. De esos libros que los puedes leer a lo largo de tu vida decenas de veces y en cada una de ellas se descubrirá nuevos mensajes de fuerza y optimismo insertados en sus páginas. Recomiendo totalmente su lectura. Sé, y soy consciente de ello, que muchas veces los libros catalogados de autoayuda, no estoy de acuerdo con ese adjetivo para este libro en concreto, son un tostón y nada más lejos de la realidad. Pero que eso no frene al lector que se interese por él. Yo lo he leído como una novela, que en mi opinión es lo que es, para así tener la asepsia mental de no caer en el bucle de pensar que es un libro más de un tema ya tan manido. Si lo examinas como novela creo que te gustará pues es imposible no conmoverse en sus páginas. Incluso, esto supongo que será por conceptos románticos por mi parte, es un libro que recomendaría leer en esta época de Navidad. El motivo no lo sé. Es un pálpito sentimental que comparto con todos mis queridos lectores/as.
Libro como digo no muy extenso y de una lectura sencilla y amena que nos lleva tras finalizar cada capítulo a una reflexión de qué haríamos si nos pasara esto, si tuviéramos tal oportunidad o qué hacer si me viera en esta tesitura. Es una obra de profundas cavilaciones. Todo el potente mensaje de este libro se aglutina en una sola palabra: “Credenda”.
Pero ya eso mis queridos amantes de la literatura tendrán que leerlo.
Saludos y buenos libros.